Hace tres años, el obispo Hédito Espinoza dice que sintió que Dios le estaba dando la oportunidad para decir basta a la creciente ola de inmoralidad que se ha instalado en Chile, a partir del eco encontrado a las demandas que los movimientos homosexuales han planteado a los gobiernos de Michelle Bachelet (periodo 2006-2010) y
Hace tres años, el obispo Hédito Espinoza dice que sintió que Dios le estaba dando la oportunidad para decir basta a la creciente ola de inmoralidad que se ha instalado en Chile, a partir del eco encontrado a las demandas que los movimientos homosexuales han planteado a los gobiernos de Michelle Bachelet (periodo 2006-2010) y el último de Sebastián Piñera.
Instalado en el universo mediático luego de ser el orador de los dos últimos Tedeums evangélicos celebrados en Jotabeche, la cruzada iniciada por el obispo Hédito Espinoza, que contempla unir al liderazgo de la iglesia chilena que profesa la fe evangélica, comienza a rendir sus primeros frutos luego de sendos llamados a pastores que deseen sumarse a su discurso que llama a “interceder a Dios por nuestra nación”, tal como reza la carta adjunta en un e mail enviado a cientos de pastores de todo Chile que asistieron a la segunda convocatoria de “Cristianos por Cristo y por Chile” que se llevó a cabo el sábado 19 de Julio pasado en la Iglesia Bendecidos para Bendecir del pastor Josué Muñoz.
La cita fue el marco para explicar a los lideres los contenidos de la agenda valórica del actual gobierno de Michelle Bachelet Jeria y los riesgos que conlleva no tener una voz que se oponga, por lo que el mensaje final del obispo Hédito Espinoza constituyó el detonante que pretende encender de una vez por tod
as la oposición a las reformas que pretende llevar a cabo el actual gobierno y que se relacionan con el aborto y el Acuerdo de Vida en Pareja.
“Dios movió los montes y los echó al mar”
Convencido de la labor que lo impulsa, el obispo Hédito reconoce que por muchos años debió contemplar como el liderazgo evangélico se debatía en luchas intestinas por figurar, sin embargo, hace unos años comenzó a darse cuenta que el Señor comenzó a remover el ambiente político y el ambiente eclesiástico, donde dice que tuvo la oportunidad, como representante de la iglesia evangélica, de darse cuenta que los ministros del ex-presidente Piñera, (Larroulet y Hinzpeter) tiraban al “tacho de la basura nuestras propuestas”. Esa fue su primera decepción. La segunda fue cuando vio a los lideres evangélicos decir que sirven a la iglesia, en circunstancias que se sirven a ellos mismos.
“Hay que compensar al liderazgo que toma protagonismo a nivel de gobierno”
Sin dar nombres, el obispo continúa dando a conocer su pesar, argumentando que el conocer de cerca a estos lideres lo hizo sentirse “muy defraudado” porque ellos comprometen a la iglesia en sus intenciones personales, por lo que “debemos”, concluye: “levantar un contrapeso”. Y el discurso del contrapeso, al parecer, está comenzando a rendir sus primeros frutos con la convocatoria que está teniendo a nivel nacional, pues según las cifras entregadas en la reunión del sábado 19, a la primera reunión llevada a cabo en junio, asistieron unos 150 pastores, y a la segunda la cifra se duplicó superando los 300 pastores entre hombres y mujeres venidos desde Arica a Punta Arenas que se fueron entusiasmados con la potente oratoria de este pastor que al finalizar se puso una bandera chilena de manto sobre sus hombros y dijo que todo lo que estaba haciendo era para la “Gloria de Dios”, en concordancia con un discurso provocativo y encendido que hace muchos años que no se escuchaba en un púlpito nacional.
Fuente: http://klamicoblog.wordpress.com/
LaVerdadAhora.com
Escribir un Comentario
Su dirección de correo no va a ser publicada. Llenar la información solicitada con *