“El descontento que causa a algunos ´evangélicos´ nuestra participación EVANGÉLICA en la Franja por el mecanismo constituyente, llamando a votar RECHAZO y Convención MIXTA, es el mismo descontento que a nosotros LA MAYORÍA EVANGÉLICA nos provoca una minoría disidente, que apoya todas las reclamaciones del mal llamado “progresismo” (matrimonio igualitario, adopción homoparental, aborto), y la decepción de otros más que hoy están por el “Apruebo”, por alguna conexión, directa o indirecta, pasada y revivida, con el socialismo y el comunismo: militancia en izquierda anterior a la conversión con resabios resurgidos actualmente por un resentimiento no superado contra el gobierno militar y su legado (por experiencias vividas en dicho período, propias o de cercanos); velado odio de clases y frustración personal por la condición socioeconómica en la que se nació; familia de izquierda y crianza en tal contexto; errónea comprensión de la teología económica del Reino (de Dios) derivando en un ‘socialismo cristiano’; fe en el buenísimo prometido por el modelo socialista (falso en todos los casos); y hasta los de la buena intención (inocente tal vez, pero utópica) de ser parte, influyente efectiva, del proceso constituyente a favor del propio cristianismo. Nosotros en cambio, y puedo decir la MAYORÍA del Pueblo Evangélico, no apoya las aspiraciones “progresistas”, e identificamos claramente el sector político desde donde se levantó la reclamación por una nueva carta fundamental, y cuales son sus intereses, contrarios a los nuestros, considerando la experiencia y resultados de los demás países de la región que han hecho el experimento. Y para quienes digan que la Iglesia no es de ningún sector, revisar contenidos bíblicos. La Derecha y la Izquierda cada una en la Biblia tienen un valor espiritual; y los salvados serán colocados a la Derecha en el Reino de Dios. Así las cosas, no está mal que su Pueblo aquí en la Tierra desde ya se coloque a ese lado, que es considerativo de Dios y es conservador, todo lo contrario del otro; ateo y cada vez más ¿liberal? NO; LIBERTINO, mejor dicho.”-Pr. Cristian L. Arévalo Meynard#RECHAZOyMIXTA#SalvemosAChile